
Este sábado alrededor de las 17:00 horas, el pesquero de Alta Mar (PAM) COBRA salió de dique seco desde los astilleros de Asmar, luego de permanecer dos días sometido a una serie de peritajes técnicos. La embarcación fue inspeccionada tras un incidente aún bajo investigación, que ha motivado el seguimiento de familiares de la tripulación y peritos independientes.

Durante los peritajes, especialistas revisaron especialmente el estado del casco de la nave. Según fuentes cercanas al proceso, los resultados fueron favorables se detectaron áreas con falta de pintura protectora y signos de raspaduras en su estructura, además pintura del BRUMA en su casco. Estos elementos podrían ser relevantes para esclarecer las condiciones en las que operaba el navío previo a su revisión.
A solicitud, los peritos representantes de la familia, hicieron el viaje de regreso al puerto de San Vicente a bordo del COBRA. El objetivo es observar en terreno el comportamiento de los sistemas de navegación e instrumentación, y verificar si existen fallas que hayan podido comprometer la seguridad de la embarcación o su tripulación.


Los peritos también se mantendrán a la espera de los resultados complementarios de laboratorio, que incluirán análisis de materiales extraídos del casco y otros componentes técnicos y químicos claves para la investigación.
El caso continúa siendo monitoreado por autoridades navales y civiles, y se espera que en los próximos días se entreguen más antecedentes que permitan esclarecer completamente lo sucedido.
